sábado, 3 de septiembre de 2011

Ladrones: Guía Mangui.

Hay un mapa que circula desde finales del 2010 por las redes sociales. No es un compendio de lugares de interés, ya sean monumentos o de ocio, si no que resume los distintos tipos de problemas que se puede encontrar un turista al llegar a una gran ciudad (en este caso se centra en Barcelona, pero podríamos hacerlo extensible a muchos otros lugares densamente frecuentados). Es como una "guía mangui" donde se describen las bandas de timadores o ladrones, para en caso de topar con ellas anticiparse al problema. Corría el rumor que había sido creada por guías turísticos y policías, pero ante el alto contenido xenófobo que se cita en sus lineas, los cuerpos de seguridad se han desmarcado. Quizá no sea un mapa cien por cien fiable pero yo mismo he podido distinguir algunos que sabía que operaban en mi ciudad. Este es un extracto del mismo. La información aparecía hace unos días resumida en El Periódico de Cataluña, así que si se os queda corto el resumen solo tenéis que navegar por su edición digital...


LOS RUMANOS DEL CULAZO

Trabajan en el metro. Generan aglomeraciones ellos mismos, aunque las estaciones donde operan suelen estar llenas de transeúntes. Son menores de 30 años y trabajan en grupos de cuatro a seis personas. Sus victimas suelen ser los turistas mochileros. En un momento dado del viaje, le dan un golpe de culo a la víctima y la dejan sin respiración, instante que aprovechan para sustraerles las pertenencias. En caso de que el perjudicado se rebote, entran los compañeros en escena.

BOSNIAS BUSCAFIRMAS

Red que se dedica a recaudar fondos para remediar distintas enfermedades. Son las más jóvenes del cotarro, habitualmente chicas de 12 a 15 años. Evidentemente, ni son sordas, ni mudas, ni retrasadas. Hacen el numerito y te intentan vaciar el bolsillo a golpe de compasión. Si la víctima está muy distraída, aprovechan también para robarle.

LOS PINCHARRUEDAS

Van en grupos de dos. En moto. Previamente han elegido el coche de la víctima y le pinchan las ruedas. Se ofrece uno a ayudarle en el cambio de neumáticos y el otro aprovecha para birlarle las pertenencias.

LOS RONALDINHOS

Grupo magrebí que trabaja con una pelota de fútbol. Mientras uno juega, hace malabares o le pasa la pelota al turista, otro aprovecha para sisarle la maleta, la cartera, o lo que lleve más a mano.

EL CAGAPALOMAS

Se acercan a la victima por detrás mientras este saca dinero de un cajero automático. Le manchan la chaqueta. Se presta a ayudarlo en la tarea de limpieza y le sustrae la cartera recién llenada.

LOS DEL AEROPUERTO

También operan en estaciones de tren. Uno espera con el coche en marcha y otros dos roban maletas, portátiles o bolsos a quien encuentren más despistado o indefenso. Al conseguir el preciado botín se suben al coche y se piran cagando leches.

EJECUTIVOS

Suelen ser latinos. Operan trajeados en hoteles o lugares donde se realizan eventos. Van con un maletín vacío y dan el cambiazo por otro de igual tamaño o color.


A estos hay que sumar los trileros, los carteristas, los rebientalunas, los... ya se sabe, en momentos de crisis, cada vez hay más manguis dispuestos a apropiarse de lo ajeno. Lo dicho, si os ha sabido a poco, echarle un vistazo al Periódico de Cataluña.
senovi.
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1 comentario:

  1. En este mapa faltaría por destacar la generalitat y en general a unos cuantos mas ladrones de guante blanco y su paradero...
    por cierto, Enric Hernàndez, director de El Periódico, admite en un artículo de opinión en 'El epílogo' de ayer que la portada pubicada este lunes sobre 'La guía mangui' fue un "error". El periodista explica que tras publicar la portada en Twitter, "la red social se incendió: centenares de usuarios -incluido un veterano exministro, con una dilatada trayectoria en organismos internacionales- expresaron sus reparos y rechazos", a mi juicio, los rechazos no eran por la notícia en sí, si no por la mala interpretación que se hizo en las redes sociales del titular, los juicios de valor y la repugnante forma xenófoga de redactarlo. Yo también opino que el lenguaje que usan no es propio de una prensa escrita de estas carácterísticas.

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